Trabajadores interpondrán acciones ante la Inspectoría del Trabajo, alegando acoso laboral. Foto William Urdaneta |
Jhoalys Siverio
11 Octubre 2013
Un grupo de siete trabajadores de la nómina fija de CVG Ferrocasa han sido removidos de su cargo y desmejorados laboralmente, lo que significa un despido indirecto. Los afectados y compañeros que también se han sentido amedrentados denunciaron a los nuevos gerentes de la empresa por el “maltrato psicológico y verbal” que reciben.
Mery Estaba, hasta hace dos días ocupaba el cargo de coordinadora de la Gerencia de Comercialización y Venta, fue cambiada a la Gerencia de Proyectos, pero “no me especificaron las funciones que voy a ejercer… me han tratado como a una delincuente… tenemos un terror psicológico por parte del tren gerencial”.
Los trabajadores aseguran que la situación ocurre desde hace cuatro meses cuando el general Juan Antonio Ferro asumió la presidencia de Ferrocasa, así como un nuevo tren gerencial, a quienes acusan de asesorar mal al representante de la empresa.
Denunciaron que los proyectos habitacionales están paralizados y, pese a la queja de los clientes, nadie da respuestas.
Yudalis Martínez fue removida de su cargo de abogada adscrita a la Consultoría de Ferrocasa. La empresa alega que les es aplicable la Ley Orgánica de Administración Pública, mientras ella se defiende argumentando que por ser fija está amparada por la Ley Orgánica del Trabajo, los Trabajadores y las Trabajadoras (Lottt).
Reclaman además beneficios sociales, viendo que los nuevos ingresos perciben salarios privilegiados; pago del retroactivo del bono de alimentación, utilidades, y “que se reactiven las ventas… tenemos que dar garantía de una vivienda digna a nuestros clientes… no pedimos aumento de sueldo sino el derecho al trabajo”, puntualizó Martínez.
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