Correo del Caroní
Marcos David Valverde
La incertidumbre continuó este sábado. Tanto como las denuncias que apuntan a que sí hubo una nueva masacre en Tumeremo, más en concreto, en la mina Nuevo Callao, en Sifontes.
Las primeras informaciones sobre el caso comenzaron el viernes, cuando el diputado Américo De Grazia, en su cuenta de Twitter, señaló que nueve hombres y tres mujeres habían sido asesinados en el lugar y que todo quedó develado cuando dos de los cuerpos aparecieron en un basurero.
De Grazia también señaló que más de cien personas estaban secuestradas dentro de la mina por el exsindicalista Anderson Pereira, a quien tildó como el sustituto de el Topo, pran minero a quien se responsabiliza por la masacre de marzo.
La esposa de Pereira declaró que no tenía que ver con la masacre y que todo ha sido una campaña en su contra.
Nuevas investigaciones
Fuentes de varios organismos de seguridad también descartaron esa tesis y apuntaron a que hubo un enfrentamiento entre bandas armadas, que terminó con la masacre. También confirmaron el secuestro dentro de la mina.
El epicentro de atención está ahora en uno de los sobrevivientes, recluido en el Hospital Dr. Raúl Leoni, de Guaiparo. Allí está custodiado por funcionaros militares.
Hasta la noche de este sábado, De Grazia no había podido corroborar las muertes. Sin embargo, los familiares continuaron con las denuncias y apuntaron a que puede haber, al menos, quince muertos.
El Ministerio Público confirmó que investiga el caso y ventiló una de las muertes: “Como parte de estos hechos, hasta el momento se tiene conocimiento de la muerte de Rosa Isabel Rivas Rojas, de 29 años, cuyo cuerpo presentó varios disparos causados con arma de fuego y fue localizado en el vertedero de basura de Tumeremo el pasado viernes 7 de octubre”.
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