Desconocen y perjudican a trabajadora de la salud, en el Hospital General Victorino Santaella Ruiz de Los Teques.
Deslinde
En el “Hospital General Dc: Victorino Santaella
Ruiz”, (HGVSR) de Los Teques, se están aplicando una serie de irregularidades a
trabajadores de la salud, cuyo único objeto hasta ahora entendible, es:
arrancarles partes de sus salarios, desmejorarlos en sus condiciones laborales
y aplicarles despidos injustificados. Todo esto, en el contextos del llamado de flexibilización de las
condiciones sociales ante la pandemia por parte del ejecutivo nacional hasta el
mes de diciembre, estimulado por la campaña electoral; un rebrote escandaloso
del Covid 19 en todo el país y en particular en el estado Miranda y un gran
nivel de sobre explotación de los trabajadores del sector, por los abrumadores
niveles de trabajo diarios, con salarios de hambre y la búsqueda del rebusque y
los recursos para el abastecimiento el hogar.
Todos los trabajadores del país, estamos viviendo niveles de explotación barbaros -por el memorándum 2792 y la complicidad de las direcciones sindicales entregadas a las gerencias y a los planes de explotación del gobierno- y en el sector salud, se cruzan con las condiciones de exclusivas generadas por la pandemia. Pero además, los trabajadores de la salud, son seres humanos que también se enferman, muchos pueden tener condiciones preexistentes que hay que tomar en cuenta y no desconocer, en el marco de la pandemia con un virus que no descarta estas condiciones, sino que las utiliza a su favor. Y ese es el caso de algunas de las enfermeras del HGVSR de Los Teques, y que en los actuales momentos se pretenden desconocer.
Hace un año, ante los inicios de la pandemia,
se entregaron “PERMISOS ESPECIALES”, a
varios trabajadores y trabajadoras, que presentaban este tipo de condiciones.
Por ejemplo, tenemos el caso de la enfermera profesional: Ana Delfina Heredia,
de 56 años, con un cuadro de “Hipertensión Arterial” y que debido a esta
situación, ella se presenta como un caso de alto riesgo, por lo que se le hace
entrega de un permiso de este tipo. En los actuales momentos, se le pretende
incorporar de forma coercitiva a su lugar de trabajo. De no hacerlo, se le
plantea suspensión hasta el mes de enero del próximo año, sin el pago debido y
que estos se harían efectivos o una parte, en esa fecha.
Visto así, esto representa un despido injustificado
y un fragrante desconocimiento de su condición de trabajadora que además sufre
una condición de hipertensión arterial. Son medidas, por fuera del marco de la
LOTTT y de una flexibilización de las condiciones laborales de trabajadora de
la salud, utilizando como escusa la “ausencia” generada por el “PERMISO ESPECIAL”.
Es un desconocimiento del instrumento generado por la Coordinación de Recursos
Humanos del mismo hospital.
Hacer justicia en este caso, como en cualquiera,
deben los trabajadores de la salud verse como clase trabajadora y ejercer presión
pública, en forma unitaria. Los trabajadores del sector han dado todo a nivel
nacional, en la lucha contra esta pandemia, y no se puede aceptar en ningún
caso, el deterioro de las condiciones de trabajo que han significado años de
lucha. No podemos admitir el deterioro
de las condiciones de trabajo y esta a la orden del día, ejercer presión en
contra de estas decisiones. Hay que hacer presión para imponer justicia.
3.Nov.2021
Ciertamente, tales trabajadores se encuentran en riesgo de contraer el Covid, fallecen en el hospital y si le quitas el salario, mueren por falta de alimentación.Y por otro lado, ese dinero injustamente retenido a donde va?
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