Por: Laclase.info
El gobierno nacional ha decidido profundizar aún más su política de ajuste, reduciendo este año las importaciones a menos de 10 mil millones de dólares. El vicepresidente para el área económica, Castro Soteldo, anunció recientemente este plan del gobierno, que ha reducido las importaciones por cinco años consecutivos, desde los 71 mil millones de dólares del año 2012 a unos 15 mil millones en 2017, llevando a una contracción económica impresionante de alrededor del 40% durante el mismo período.
Esta política de recorte ha estado al servicio de los pagos de deuda externa, más de 70 mil millones de dólares en los últimos cuatro años. La destrucción económica que esta política ha acarreado es de tal magnitud que incluso la industria petrolera ha disminuido su producción a menos de un millón y medio de barriles diarios y la industria eléctrica ha colapsado en gran parte del país. El de por sí débil parque industrial no petrolero ha sido diezmado al no realizarse importación de materias primas e insumos industriales. El gobierno ha cubierto el déficit fiscal aumentando la masa monetaria, lo que ha generado una brutal hiperinflación y la destrucción de los salarios, cuyo promedio está por debajo de los diez dólares mensuales.
A contravía de estos hechos, Castro Soteldo declaró por las redes sociales que “el reto que enfrenta el país para el año venidero es pasar de la victoria política a la gran victoria económica… satisfacer la demanda de bienes, fortalecer el poder adquisitivo, reducir los niveles de desigualdad, combatir el desempleo y reducir de manera drástica los niveles de importación… Disminuir en un 40 % como meta mínima la importación”.
Las importaciones en 2017 rondaron los 13 mil millones de dólares. El recorte propuesto las llevaría a menos de 8 mil millones de dólares, un nivel incluso más bajo que el del año 2002 en que se realizó el golpe de Estado y el sabotaje petrolero. Las importaciones podrían caer a los niveles del año 1996.
A comienzos de marzo, el vicepresidente ejecutivo, El Aissami, anunció el veto a la importación de maíz, azúcar, arroz, leguminosas, cacao, café y soja. “El Presidente ha insistido en que Venezuela debe, en los próximos meses, ser autosuficiente”, dijo el funcionario durante una reunión con empresarios. Lejos del autoabastecimiento de alimentos, Venezuela ha visto aumentar drásticamente la subnutrición de la población. De llevarse a cabo los planes del gobierno para este año, la crisis alimentaria podría dar un salto cualitativo hacia una hambruna.
Desde el Partido Socialismo y Libertad y la Oposición de Izquierda en Lucha se ha denunciado el ajuste inflacionario aplicado por el gobierno. Los opositores de izquierda exigen el cese del pago de la deuda externa y el uso de esos recursos para restablecer las importaciones y la producción nacional, como parte de un plan económico alternativo que dé respuesta a la crisis del hambre y a la destrucción salarial.
(*) Infografía de Carlos Betancour.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por compartir con todos tus comentarios y opiones