Por: Prensa C-cura Petróleo
Cientos de trabajadores se movilizaron el martes a las puertas de Petrocedeño en defensa de Bladimir CarvajalJueves, 17 de septiembre de 2015. El pasado martes 15 de septiembre, Bladimir Carvajal, miembro del Tribunal Disciplinario de la Futpv y dirigente de C-cura en Petrocedeño, fue bajado abruptamente por la Guardia Nacional del autobús que transporta a los trabajadores petroleros al Condominio de Jose en el estado Anzoátegui.
Uno de sus supervisores le habría informado que no podía ingresar a la planta porque pesaba sobre él una solicitud de despido en la Inspectoría del Trabajo.
Al dirigente sindical se le impidió ingresar a su sitio de trabajo en medio de un despliegue de policías, guardias nacionales, abogados de la empresa, y todo un aparataje que asemejaba a una película de Hollywood. Lo que no se hace contra los delincuentes, se ejecuta contra un honesto trabajador, defensor de los derechos laborales.
La realidad de todo este atropello es que Carvajal es uno de los principales dirigentes autónomos y clasistas en Petrocedeño. Que ha estado a la cabeza de la lucha por refugios para los operadores de planta, por baños dignos con los insumos de jabón y papel sanitario. Carvajal ha estado a la cabeza de la exigencia de los trabajadores por bragas, botas, detectores de gases, máscaras de escape, y otros insumos necesarios para el trabajo.
Al dirigente sindical de C-cura se le está cobrando el ser un defensor a ultranza del contrato colectivo, violado sistemáticamente por la gerencia, y un luchador incansable porque se inicie la discusión del contrato vencido.
A Bladimir Carvajal se le está violentando el derecho a la defensa, y ni siquiera se le ha notificado oficialmente la medida de calificación de despido, vulnerándose el debido proceso.
La acción contra Carvajal es a todas luces un exabrupto. Se argumenta que habría faltado injustificadamente, pero en realidad se trata de un trabajador intachable, al que todos sus compañeros de trabajo lo conocen como “El Técnico”, precisamente por su gran capacidad de trabajo, y por sus habilidades para resolver los problemas en un complejo mejorador de petróleo extrapesado.
En rigor, la medida contra el dirigente sindical de C-cura es parte de la persecución a la que son sometidos todos los que luchan de manera autónoma por los derechos de los trabajadores petroleros. Es una expresión del amedrentamiento constante para taparle la boca a los que se levantan contra los atropellos en Petrocedeño, cometidos por una gerencia sorda y muda, incapaz de resolver la larga lista de problemas y calamidades que atraviesan los trabajadores en el complejo de Jose.
Lo que intenta la gerencia de Pdvsa en Petrocedeño es arrodillar a la corriente C-cura y sus activistas que desde hace años son la vanguardia en la lucha por las reivindicaciones de los petroleros. Se está tratando de liquidar a uno de los dirigentes, que sin ninguna duda, se pondrá a la cabeza de la lucha por la discusión contractual y por la realización de las elecciones en la Futpv.
Pero Carvajal y C-cura no están solos, cuentan con el respaldo incondicional de los trabajadores, que desde el martes se están movilizando en todas las áreas de Jose; que mantienen los brazos caídos, garantizando la producción, en señal de protesta por el despido de su dirigente. Pero este apoyo se extiende como reguero de pólvora por otras áreas petroleras. En Monagas varios taladros se paralizaron por una hora, de Petropiar se recibe el respaldo de los trabajadores, incluso en el Zulia, el sur de Anzoátegui y otras áreas la protesta se extiende, amenazando con una rebelión generalizada.
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