Retraso judicial ha impuesto una extenuante espera a familia del trabajador de FMO acusado de homicidio

Defensa y allegados esperan la pronta liberación de Rodney Álvarez ante
el retardo procesal de casi seis años Foto William Urdaneta

Jhoalys Siverio
Correo del Caroní

Son casi seis años desde que Rodney Álvarez, trabajador de Ferrominera, fue apresado el 17 de junio de 2011, acusándosele del asesinato del ferrominero Renny Rojas cuando se celebraba una asamblea para la elección de la comisión electoral de los comicios del Sindicato de Trabajadores de Ferrominera Orinoco (Sintraferrominera), hecho ocurrido el 9 de junio de 2011.

Desde entonces han sido numerosas las audiencias de Álvarez sin que el proceso culmine, esperando que este 1 de febrero se lleve a cabo la nueva audiencia en la ciudad de Caracas y culmine el caso.

“Se trata de un trabajador que lleva seis años preso por solo estar en una asamblea de trabajadores, con un derecho legítimo que consagra el artículo 95 de la Constitución (...) eso es un delito para el gobierno”, manifestó Manuel Sarabia, abogado de Álvarez, quien denuncia además el maltrato y humillación en el caso de su defendido, así como la situación que enfrentan desde entonces sus familiares.

Sarabia insiste en que no hay elementos en las pruebas presentadas que prueben la culpabilidad de Álvarez. En vista del retardo procesal en el caso, exige a la jueza María Eugenia Núñez una medida absolutoria de libertad o una cautelar sustitutiva de libertad. También exhorta a los trabajadores a abocarse al caso, el cual califica como parte de la criminalización de la protesta.

Por su parte, Pilar Aguilera, trabajador de Ferrominera, destacó que en la estatal todos saben que es inocente. Asimismo, hizo un llamado a la dirigencia sindical “que hace caso omiso, sabiendo que (Rodney) está preso injustificadamente”. Mantiene sus expectativas por la pronta liberación de Álvarez.