La venezolana Rosa Rodríguez apenas celebró su clasificación para las semifinales del lanzamiento de martillo de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro con su mejor marca de la temporada, debido a la complicada situación política y económica que atraviesa su país. "Espero que cuando llegue a Venezuela, la cosa no sea como lo que se plasma en las noticias ni en la realidad que siempre estoy viendo", señaló Rodríguez, con extrema sobriedad, pese a haber lanzado el martillo a 72,41 metros, el segundo mejor registro de su grupo, el A, y el tercero de todas las participantes.
"La situación es complicada, pero tenemos el poder para cambiarla", añadió la campeona sudamericana de la especialidad, tras confesar que su familia apenas le cuenta nada de lo que sucede en Venezuela para no distraerla de su actividad deportiva. "No quieren que me mortifique ni que viva esa tensión, sino que me concentre en lo mío", explicó Rodríguez, que la mitad del año vive y se entrena en Eslovenia.
"En mi país, hay bastantes deficiencias y, aunque se aprobó un proyecto para recuperar cuatro pistas, aún estamos esperando", añadió, después de que el también venezolano Albeth Bravo denunciara la absoluta precariedad del atletismo del país sudamericano. "En Venezuela no puedo entrenarme porque no hay pistas sinténticas, todo está en el piso", aseguró Bravo, luego de quedarse fuera de las semifinales de los 400 metros con un tiempo de 46,15, el sexto de su serie.
Como Rodríguez, Bravo tuvo que abandonar Venezuela para poder entrenarse al nivel que exige la élite. Lo hace en el Centro de Alto Rendimiento de Madrid con su preparador de todo la vida, el también venezolano Macoli MacGregor. Allí pasa buena parte del año y esa distancia agrava sus sensaciones respecto a la grave situación que atraviesa su país. "El país pasa por muchos problemas y estar tanto tiempo fuera, sabiendo cómo lo están pasando allá, produce también un cansancio mental", aseguró Bravo, campeón sudamericano de los 400, decepcionado también por no haber logrado una clasificación para la que había trabajado muy duro y creía tener al alcance.
"Nosotros vivimos prácticamente en la frontera con Colombia, así que la situación es bastante dura", prosiguió el velocista venezolano, cuya familia sí lo mantiene al corriente de lo que sucede. "Nosotros nos alejamos cinco o seis meses, pero ellos siguen allí, con más de lo mismo", concluyó Bravo, alicaído por su resultado, pero, sobre todo, por las penurias económicas que pasan sus compatriotas.
[Tomado de http://www.correodelcaroni.com/index.php/deportes/olimpiadas-rio-2016/item/48386-atletas-venezolanos-denuncian-precaria-situacion-del-pais.]
"En mi país, hay bastantes deficiencias y, aunque se aprobó un proyecto para recuperar cuatro pistas, aún estamos esperando", añadió, después de que el también venezolano Albeth Bravo denunciara la absoluta precariedad del atletismo del país sudamericano. "En Venezuela no puedo entrenarme porque no hay pistas sinténticas, todo está en el piso", aseguró Bravo, luego de quedarse fuera de las semifinales de los 400 metros con un tiempo de 46,15, el sexto de su serie.
Como Rodríguez, Bravo tuvo que abandonar Venezuela para poder entrenarse al nivel que exige la élite. Lo hace en el Centro de Alto Rendimiento de Madrid con su preparador de todo la vida, el también venezolano Macoli MacGregor. Allí pasa buena parte del año y esa distancia agrava sus sensaciones respecto a la grave situación que atraviesa su país. "El país pasa por muchos problemas y estar tanto tiempo fuera, sabiendo cómo lo están pasando allá, produce también un cansancio mental", aseguró Bravo, campeón sudamericano de los 400, decepcionado también por no haber logrado una clasificación para la que había trabajado muy duro y creía tener al alcance.
"Nosotros vivimos prácticamente en la frontera con Colombia, así que la situación es bastante dura", prosiguió el velocista venezolano, cuya familia sí lo mantiene al corriente de lo que sucede. "Nosotros nos alejamos cinco o seis meses, pero ellos siguen allí, con más de lo mismo", concluyó Bravo, alicaído por su resultado, pero, sobre todo, por las penurias económicas que pasan sus compatriotas.
[Tomado de http://www.correodelcaroni.com/index.php/deportes/olimpiadas-rio-2016/item/48386-atletas-venezolanos-denuncian-precaria-situacion-del-pais.]
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