Denunciaron fraude en elecciones de Trabajadores Petroleros

Es ilegal la ubicación de los centros de 
votación en los comandos de guardia 
nacional, alertó el sindicalista José Bodas.

Por: Ana Díaz 
El Nacional

23 de junio 2016. El oficialismo no quiere perder las elecciones de la Federación Única de Trabajadores Petroleros de Venezuela del 30 de agosto próximo. “Para amedrentar a los empleados varias mesas electorales del país estarán en los comandos de la Guardia Nacional Bolivariana”, denunció José Bodas, directivo de la Futpv.

El dirigente, acompañado de un grupo de trabajadores de Pdvsa, destacó que además de violentar la libertad sindical, garantizada en la Constitución y el Convenio 87 de la Organización Internacional del Trabajo, la ubicación de las mesas en locales de la GNB persigue permitir el ingreso de militantes del PSUV y miembros de las UBCH que no trabajan en la industria petrolera.

“Las maniobras consistieron en modificar el padrón electoral. De 100.000 trabajadores inscritos en los sindicatos de base, 60.000 fueron excluidos mientras que los 40.000 restantes resultaron aceptados porque han mostrado lealtad al gobierno”, añadió.

El sindicalista indicó que al igual que el proceso de validación de las firmas del referéndum revocatorio, en los comicios petroleros los centros de votación asignados a muchos electores están alejados de sus sitios de trabajo. “Por ejemplo, a la gente que labora en la refinería de Puerto La Cruz la mandan a votar a Anaco o El Tigre”, dijo.

Agregó que la Corriente Clasista Unitaria Revolucionaria Autónoma impugnará estas irregularidades ante la comisión electoral de la Futpv y si no hay respuesta acudirá a otras instancias judiciales y laborales.

“Los rojo rojitos de la Futvp, liderados por su presidente, Wills Rangel, tratan de impedir que los trabajadores expresen su descontento con esa dirigencia que vendió los contratos colectivos a la patronal”, afirmó el también dirigente de Ccura.

Al respecto explicó que un trabajador petrolero gana en Venezuela 78 dólares mensuales; sin embargo, sus iguales en Suramérica perciben salarios de 3.500 dólares al mes.