Clavel A. Rangel Jiménez
crangel@correodelcaroni.com
¿En dónde está detenido? ¿Qué delitos se le imputan? ¿Qué medida se dictó en la audiencia preliminar? ¿Quiénes estarían vinculados en los presuntos delitos?
Las preguntas que gravitan en la opinión pública que no han sido respondidas por el Ejecutivo a una semana de que el presidente de la república, Nicolás Maduro, anunciara la detención del ex titular de Ferrominera Orinoco, Radwan Sabbagh.
A siete días de haberse anunciado la medida, el paradero del ex presidente de la extractora y procesadora de mineral de hierro es desconocido. Cercanos al gerente han denunciado que la detención de Sabbagh es ilegal por cuanto no se ha dado la audiencia de presentación, desconocen los delitos imputados y en consecuencia, se ha alterado el debido proceso.
Los trabajadores suponen que el ex presidente está detenido en la sede de la Dirección de Inteligencia Militar (DIM) en Caracas. Se supo, además, que esta semana se contempló -incluso- trasladarlo hasta Ciudad Guayana donde, según allegados, estaría radicado el expediente.
Cambios gerenciales
Entre tanto, en Ferrominera los movimientos de personal se han dado tal y como lo anunció el ministro de Industrias, Ricardo Menéndez, quien el pasado 13 de junio dijo a través de su cuenta en Twitter que “para garantizar operatividad de la planta y transparencia de investigaciones se ajustarán parte de los equipos gerenciales en Ferrominera”.
En una semana, los gerentes de comercialización y ventas, asistente de la gerencia, administración de beneficios, asistente de presidencia, seguridad patrimonial, labores, secretaría de la junta directiva, gerencia general de finanzas, planificación estratégica y servicios fueron despedidos de la estatal, otorgándoseles la jubilación a dos de ellos.
Fiscales del Ministerio Público han entregado citaciones y efectivos de la Dirección de Inteligencia Militar se han concentrado en la gerencia de comercialización y ventas donde se presume están las irregularidades que condujeron a la detención de Sabbagh.
En sustitución de algunos funcionarios, han traído personal foráneo, hasta ahora dos de ellos militares, quienes extraoficialmente asumirán la gerencia de ventas. Ferrominera era la única empresa donde -hasta ahora- no se había entregado las finanzas a los castrenses.
Sin embargo, a diferencia de otros procedimientos, esta vez las sustituciones no han sido oficializadas a los trabajadores como se acostumbra, vía correo electrónico, a cada uno de los empleados.
El presidente de la estatal, Iván Hernández, dijo este miércoles -durante la inauguración del programa Mercal-Pdval Obrero- que ha centrado su atención en el área de comercialización y ventas para lograr un mejor control y corregir los “entuertos” hallados en esa gerencia.
Desviación de recursos
Sabbagh es el único presidente de empresa básica acusado de corrupción y detenido por su supuesta participación en actos ilícitos en la industria de Guayana.
La semana pasada el presidente Nicolás Maduro aseveró que el funcionario dejó “una banda de corruptos” que estaban “negociando con los minerales que le pertenecen a Venezuela pero, además, como él sabía que ya lo estábamos investigando, empezó… vino y firmó un conjunto de reivindicaciones laborales por encima de las posibilidades económicas de la empresa. Primero sin recursos, lo tienen que establecer los órganos competentes, la Fiscalía, los Tribunales, y sin autorización del gobierno central”.
La investigación en Ferrominera comenzó el 19 de noviembre de 2012 en la gerencia de seguridad patrimonial y se retomó el pasado 7 de mayo, previa aprehensión del ex titular de la estatal.
Sabbagh dirigió la empresa desde 2006. La estatal siempre fue destino favorito del presidente Hugo Chávez; en tiempos de campaña electoral, Ferrominera se convirtió en la caja chica del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
¿En dónde está detenido? ¿Qué delitos se le imputan? ¿Qué medida se dictó en la audiencia preliminar? ¿Quiénes estarían vinculados en los presuntos delitos?
Las preguntas que gravitan en la opinión pública que no han sido respondidas por el Ejecutivo a una semana de que el presidente de la república, Nicolás Maduro, anunciara la detención del ex titular de Ferrominera Orinoco, Radwan Sabbagh.
A siete días de haberse anunciado la medida, el paradero del ex presidente de la extractora y procesadora de mineral de hierro es desconocido. Cercanos al gerente han denunciado que la detención de Sabbagh es ilegal por cuanto no se ha dado la audiencia de presentación, desconocen los delitos imputados y en consecuencia, se ha alterado el debido proceso.
Los trabajadores suponen que el ex presidente está detenido en la sede de la Dirección de Inteligencia Militar (DIM) en Caracas. Se supo, además, que esta semana se contempló -incluso- trasladarlo hasta Ciudad Guayana donde, según allegados, estaría radicado el expediente.
Cambios gerenciales
Entre tanto, en Ferrominera los movimientos de personal se han dado tal y como lo anunció el ministro de Industrias, Ricardo Menéndez, quien el pasado 13 de junio dijo a través de su cuenta en Twitter que “para garantizar operatividad de la planta y transparencia de investigaciones se ajustarán parte de los equipos gerenciales en Ferrominera”.
En una semana, los gerentes de comercialización y ventas, asistente de la gerencia, administración de beneficios, asistente de presidencia, seguridad patrimonial, labores, secretaría de la junta directiva, gerencia general de finanzas, planificación estratégica y servicios fueron despedidos de la estatal, otorgándoseles la jubilación a dos de ellos.
Fiscales del Ministerio Público han entregado citaciones y efectivos de la Dirección de Inteligencia Militar se han concentrado en la gerencia de comercialización y ventas donde se presume están las irregularidades que condujeron a la detención de Sabbagh.
En sustitución de algunos funcionarios, han traído personal foráneo, hasta ahora dos de ellos militares, quienes extraoficialmente asumirán la gerencia de ventas. Ferrominera era la única empresa donde -hasta ahora- no se había entregado las finanzas a los castrenses.
Sin embargo, a diferencia de otros procedimientos, esta vez las sustituciones no han sido oficializadas a los trabajadores como se acostumbra, vía correo electrónico, a cada uno de los empleados.
El presidente de la estatal, Iván Hernández, dijo este miércoles -durante la inauguración del programa Mercal-Pdval Obrero- que ha centrado su atención en el área de comercialización y ventas para lograr un mejor control y corregir los “entuertos” hallados en esa gerencia.
Desviación de recursos
Sabbagh es el único presidente de empresa básica acusado de corrupción y detenido por su supuesta participación en actos ilícitos en la industria de Guayana.
La semana pasada el presidente Nicolás Maduro aseveró que el funcionario dejó “una banda de corruptos” que estaban “negociando con los minerales que le pertenecen a Venezuela pero, además, como él sabía que ya lo estábamos investigando, empezó… vino y firmó un conjunto de reivindicaciones laborales por encima de las posibilidades económicas de la empresa. Primero sin recursos, lo tienen que establecer los órganos competentes, la Fiscalía, los Tribunales, y sin autorización del gobierno central”.
La investigación en Ferrominera comenzó el 19 de noviembre de 2012 en la gerencia de seguridad patrimonial y se retomó el pasado 7 de mayo, previa aprehensión del ex titular de la estatal.
Sabbagh dirigió la empresa desde 2006. La estatal siempre fue destino favorito del presidente Hugo Chávez; en tiempos de campaña electoral, Ferrominera se convirtió en la caja chica del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
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