Por: Armando Guerra
Hoy martes a tempranas horas de la mañana se instaló la huelga de hambre de los bomberos de Los Teques. El cuartel general de este servicio, está ubicado en la vía a San Pedro, frente a la UNESR, una vez pasas el mercado municipal. Si usted tiene la oportunidad de transitar frente a estas instalaciones notará gran cantidad de unidades, y es natural que piense que el cuerpo de bomberos está suficientemente dotado para cubrir cualquier contingencia, a juzgar con la cantidad de unidades visibles. Pues no. La triste realidad es que muchos de estos vehículos están en mal estado y por ninguna parte se ven los recursos que se requieren para su actualización.
Los bomberos destaparon la hoya podrida de la gobernación de Miranda.
Ocho son los trabajadores que dispusieron hacer huelga de hambre y manifestar su ira y descontento contra las autoridades de la gobernación. Se trata de Roberto Rincón, cabo 2do; Julio Rincón, delegado; Ronald Perdomo, cabo 2do; Juan García, cabo 2do; Wilson Morales, cabo 2do; Cesar Arana, delegado; Ángel González, bombero y Yacksel Briceño, bombero. Sin embargo, esta medida afecta a 1600 trabajadores distribuidos entre los distintos destacamentos en el estado.
Recibo en manos varios trabajadores demostraban el monto total cobrado, por quincena. Unos alcanzaban a 900 Bsf, otros solo llegan a 870 Bsf; en el país donde hemos escuchado de voz de algún candidato presidencial afirmar, que en Venezuela se gana uno de los salarios mas altos del mundo. Ya vemos que no.
Los bomberos son un significativo ejemplo de la situación de pauperización que viven los trabajadores del país. Entre otras exigencias reclaman, la prima de riesgo, bono nocturno y el pago de sus prestaciones sociales. "Esta mañana escuchamos en un programa de radio a la gobernadora encargada –Adriana Delia- afirmar que esta dependencia ha solicitado tres créditos adicionales sin lograr su aprobación". Sin embargo, las informaciones suministradas por Roberto Rincón, uno de los bomberos en huelga de hambre nos afirma que "estos créditos adicionales han sido aprobados y sus montos desviados para cubrir otras prioridades". Es necesario recordar que de esta gobernacion salio el candidato presidencial que se ufana hablando de "progreso", bueno, veamos.Ya vemos como es el progreso.
Para seguir con la lista de derechos violados, los jubilados así, como el personal que se ha retirado del servicio desde hace dos años aproximadamente, no han recibidos sus liquidaciones y pagos mensuales. Se les adeudan 24 meses del fondo de prestaciones del Banco del Instituto Autónomo, al que fueron trasladados desde la administración de Enrique Mendoza, y el bono de transporte, que se debería recibir trimestralmente nunca se cumple.
Como se tensa y acuerda este conflicto
Esta situación se arrastra desde hace varios años. Durante el 2009 se instalaron mesas de trabajo, en las que no se llegó a nada. Se reanudaron en el 2011, por el malestar generado con los bajos salarios y la mora de 20 meses en los fondos de las prestaciones sociales. A esta situación se suman las burlas y las fechorías del administrador Antonio Armas y el jefe de compras Carlos Almenar.
El primero se postuló para formar parte de la delegación que viajaría a estudiar y hacer los cursos de entrenamientos en la Escuela de Ingenierías del Fuego, en Texas; cuando este personaje ni siquiera es bombero. Tanta burla y derroche, ha ido colmando a los trabajadores, que además de verse privados de estar con sus familias, no tienen nada que ofrecerles.
Los bomberos fueron estableciendo mecanismos de comunicación con las otras dependencias en el estado Miranda, a fin de lograr unidad entre ellos. Ocho trabajadores, hoy toman la determinación de hacer huelga de hambre en las instalaciones ante el conjunto y apoyo de sus compañeros, mientras que los personajes a los que denuncian y por los que exigen a las autoridades sean investigados: Antonio Armas y Carlos Almenar, salen corriendo de las instalaciones por la puerta de atrás, evitando la turba en huelga.
Esta acción de protesta no puede quedar aislada. Se requiere la solidaridad de las comunidades aledañas, de los Consejos Comunales, los vecinos organizados, los sindicatos de base y los gremios, en apoyo a quienes han prestado servicios de rescate en los Altos Mirandinos.
Solidaridad con los bomberos.
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