Primarias: Una rebelión social y democrática brota desde lo más profundo del pueblo

Por:  Miguel Angel Hernández*

Atalaya Revolucionaria 

laclase.info

No basta con el populismo rampante a la vieja usanza adeca de comprar conciencias, ahora con carros iraníes, neveras chinas, y casas que sólo se ven en maquetas. La participación de más de 3 millones de personas en las primarias convocadas por la MUD, contra todos los pronósticos sesudos de analistas como el inefable Mario Silva, se constituyó en un duro golpe al gobierno, que de su inicial mutismo "rojo rojito" pasó a argumentos erráticos, sembrando dudas en el mismísimo CNE, lo cual rápidamente fue respondido por Tibisay Lucena, salvando su pellejo y reconociendo la pulcritud del proceso.


Lo que sucedió el pasado domingo 12 fue una rebelión electoral silenciosa, continuación de las más de 5000 protestas que se produjeron el pasado año. Esta masiva participación en las primarias convocadas por la MUD es un pase de factura a un gobierno incapaz, corrupto y autoritario, que criminaliza la protesta y restringe las libertades democráticas. Se equivocan de cabo a rabo quienes se dejen seducir por el discurso oficial de que esta alta votación significa un giro hacia la derecha de millones de compatriotas.

Un amplio sector del pueblo venezolano hastiado de promesas incumplidas, de un discurso arrogante y autoritario, se expresó contra la inseguridad, los bajos salarios, la alta inflación, el desabastecimiento, el desempleo, y la crisis de los servicios. Incluso castigó a los alcaldes de la MUD que pretendían reelegirse, convirtiendo las primarias en un revocatorio adelantado.
Lamentablemente, en ese proceso de ruptura, no encontró si no a Capriles Radonski, otro representante de la burguesía del que no podemos esperar bondades, como opción frente a la debacle del chavismo que se desgasta a pasos acelerados.

De esta rebelión no se salvó Acción Democrática que dejó de ser alternativa hace años. Ese aparato político de la burguesía criolla y el imperialismo ya gobernó durante décadas, y los resultados de las primarias pusieron en evidencia que junto a Copei, ha pasado a mejor vida, avasallado por la poderosa revolución democrática que se produjo entre el 2002 y el 2003.

El gobierno acusó el golpe
El gobierno ha tenido una errática y burda reacción, complementada por la infame decisión del TSJ, queriendo sembrar dudas sobre los resultados y la alta participación electoral. Esta actitud ya costó una vida en Maracay, así como una violenta arremetida de encapuchados del PSUV contra estudiantes que manifestaban en la facultad de Agronomía de la UCV en Maracay. Todo esto refleja que el gobierno acusó el golpe. No estaba en sus cálculos esta masiva participación, la cual podría estar presagiando lo que ya hemos dicho en nuestro periódico Voz de los Trabajadores: por primera vez existe la posibilidad de que Chávez pierda unas elecciones presidenciales.

Este proyecto nacionalista burgués disfrazado de “socialismo del siglo XXI” se está agotando. En rigor sólo ha servido para enriquecer a una emergente casta parásita beneficiaria de los recursos del Estado, entregada de rodillas a gobiernos y empresarios de China, Rusia, Bielorrusia, Irán, Brasil o España, incluso a las transnacionales gringas. Los estertores de su crisis se sienten en Miraflores, en los cuarteles y en las bases honestas del PSUV que no terminan de verle el queso a la tostada a una revolución que después de 13 años no se manifiesta por ninguna parte.

El gobierno sabe que la tiene difícil de cara al 7 de octubre, y después de una mora de más de una década, desempolva la reforma de la Ley Orgánica del Trabajo; regala carros, línea blanca, línea marrón, y cuantos colores hay en el arco iris; lanza el enésimo plan de vivienda, ahora con el pomposo nombre de Gran Misión Vivienda, quizás con la expectativa de exorcizar los fracasos anteriores.

Más allá de que haya sido la MUD quien convocó las primarias, en las que nuestro partido no participó, manteniendo su independencia de clase frente a los dos polos burgueses, reivindicamos el derecho democrático de la población a expresarse electoral y políticamente.
No obstante, decimos que no es de la mano de Capriles Radonski como podemos enfrentar en el terreno electoral al actual gobierno. Este es el candidato de partidos cuyos intereses están casados con el empresariado y el imperialismo, y no tiene nada que ofrecer al pueblo venezolano, más allá de su supuesto “progresismo”, y su aparente neutralidad alejada de la izquierda y la derecha. Su oferta de un "Plan Económico con Anestesia", desde ya, debe poner en guardia a todo el pueblo venezolano.

Desde el PSL planteamos que es más urgente que nunca construir una alternativa con todos aquellos activistas y luchadores, trabajadores, jóvenes y pobladores de las comunidades que comienzan a romper con el chavismo y su aparato partidista, pero que tampoco ven una opción en los partidos de la MUD y su candidato presidencial.

Tanto el chavismo como Capriles son dos caras de una misma moneda antiobrera y antipopular, por ello los revolucionarios honestos y verdaderos debemos conformar una alternativa política, que acompañe las luchas que se desarrollan en el país, y que al unísono pelee también en el terreno electoral por construir un frente, un bloque que vaya creciendo poderosamente al calor de la alta conflictividad que vivimos, y le presente a los trabajadores y trabajadoras venezolanas una opción de gobierno de cara a las elecciones presidenciales del 7 de octubre, y los otros procesos electorales que se avecinan.

*Secretario general del Partido Socialismo y Libertad (PSL)
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